Archidiócesis de Sevilla

Arquitecto Adolfo Fernández Casanova

Archivo de la Catedral de Sevilla. Fondo Junta de Obras

 Debido a las obras de restauración integral a las que está siendo sometida la Giralda desde el año 2017, centradas actualmente en la cara norte de la misma, hemos considerado de interés destacar el primer proyecto contemporáneo de restauración de la torre, que dio comienzo en 1884 y cuyo expediente se conserva en el Archivo de la Catedral de Sevilla.

La gravedad del mal estado de conservación que presentaba el edificio catedralicio hacía 1881 motivó la apertura de un expediente de restauración del templo hispalense ante el Ministerio de Fomento. Como consecuencia de ello se designó y encargó al arquitecto Adolfo Fernández Casanova, el 14 de diciembre de 1881, para que visitara el monumento y elaborara una memoria explicativa del estado de las fábricas. En el mismo mes de diciembre el arquitecto remitió un informe preliminar al Ministerio donde, por Real Orden de 24 de diciembre de 1881, se determinó que “mientras se formula y aprueba el proyecto definitivo de las obras generales de restauración de la Catedral de Sevilla, se proceda inmediatamente a ejecutar las de apeos, encimbrados y acodalamientos propuestas por el arquitecto”.

Daban comienzo de esta manera en diciembre de 1881 los trabajos de restauración de la Catedral que se prolongarían durante más de cuatro décadas, para cuyo seguimiento y control se constituyó una Junta de Obras de la Catedral de Sevilla formada por el deán, Francisco Bermúdez Cañas, y cuatro técnicos en la materia.

En ese contexto es conocido cómo, los días 25 de abril de 1884 y 18 de junio de 1885, dos descargas eléctricas causaron desperfectos importantes en la Giralda. Ante esta situación el citado arquitecto redactó hasta cinco proyectos encaminados a realizar intervenciones en la Giralda entre 1884 y 1887, uno de ellos para la instalación de un pararrayos.

En el primero de sus proyectos, firmado el 11 de noviembre de 1884, que es el que presentamos aquí, junto a la Memoria redactada incorporó unos planos con recreaciones de cómo pudo ser la torre en su devenir histórico. En uno de ellos, cuya imagen acompaña a este texto, se representa el alminar anterior al terremoto de 1356, con el yamur que perdió como consecuencia del movimiento sísmico. En otro de los planos reunió imágenes posteriores al temblor que dató en el año 1394, -año de nacimiento de Cristo de 1356-, obtenidas de diferentes fuentes de información, como el cuadro de Esturmio de la capilla de los Evangelistas o del libro nº 65 de coro de la Catedral hispalense. Según distintos autores, Fernández Casanova con sus intervenciones pretendió, en la medida de lo posible, devolver a la Giralda su aspecto original, pero varias de sus propuestas fueron rechazadas por la Academia de San Fernando.

La documentación generada por esa Junta de Obras se conserva en el Archivo de la Catedral de Sevilla y está constituida por 16 libros y 54 legajos, con un total de 87 planos anejos a cada proyecto. Una parte importante de ellos son duplicados, borradores o copias en ferroprusiato de los documentos que se enviaron al Ministerio de Fomento y que hoy día pueden consultarse en el Archivo General de la Administración, además de las actas, correspondencia entre las partes, cuentas, gastos y varios.

Mª Isabel González Ferrín,

jefa del Área de los Archivos Catedral y Arzobispal de la Institución Colombina de Sevilla