Archidiócesis de Sevilla

La Regla de la Hermandad y Cofradía de la Santísima Trinidad de Salteras datada en 1438, destaca por su singular belleza e importancia histórica y por tratarse de la Regla de Hermandad original más antigua inventariada hasta el momento en este Fondo Arzobispal de Sevilla.

La subserie de Hermandades de este Fondo archivístico conserva más de 270 legajos cuyas fechas extremas van desde el siglo XV al XX. En ella se encuadran las reglas y estatutos que se presentan ante el Provisor o Juez Eclesiástico para su aprobación, y en este Fondo, Sección y Serie Documental se encuadran estas Reglas.

En la villa de Salteras existieron tres ermitas con centros de acogida de hombres pobres y sin medios, mujeres enfermas o transeúntes afectados por epidemias, necesitados de comida, alojamiento o protección, todos ellos regidos por sus respectivas hermandades.

La Ermita de la Santísima Trinidad, regida por la Cofradía del mismo nombre, atendía a hombres pobres y desvalidos (las mujeres lo eran en el hospital de Nuestra Señora de la Oliva) constituyendo una institución medular en la vida de la Iglesia de Salteras del s. XV al cumplir con el fundamental cometido de asistencia física y auxilio espiritual a sus miembros y necesitados, especialmente en uno de los momentos más trascendentales de la vida: el momento de la muerte, pues los “cofrades y cofradas” tenían  obligación de asistir y acompañar en los entierros a los que mueren desamparados, fuesen o no miembros de la misma.

Las Reglas de Hermandades constituyen los textos más importantes emanados de las Juntas de Gobierno y la principal fuente jurídica y normativa de su gobierno y administración, además de ser los documentos que más atención provocan en el investigador por su consustancial interés documental e histórico y por su valor como obra de arte.

Estas Reglas de la Santísima Trinidad de Salteras, con textos en español y latín, fueron mandadas confeccionar por el prioste de la Cofradía, Pedro García, en 1438 (datadas aún por la Era Hispánica de 1476) como expresamente señala en el preámbulo del 1er. capítulo. No parece que la fecha de aprobación de las mismas sea la de su fundación, pues en su constitución 15 se habla de un cabildo de hermanos efectuado en julio de 1435, tres años antes de su confección. Los textos presentan 14 primeras constituciones a las que se añaden otras seis a partir de ese cabildo de 13 de julio de 1435, hasta un total de 20. Las últimas dos hojas -parcialmente ilegibles- recogen otros 10 capítulos y refrendos, hasta llegar al último acuerdo de 1488.

Se trata de un códice en 4º cuya encuadernación en piel gofrada en seco se encontraba, previo a su reciente restauración, en regular estado de conservación, conservando en su interior restos de cuadrantes de puntador y borradores en papel coetáneos, que consolidaban y aportaban rigidez a la misma. Sus 16 hojas manuscritas en pergamino y foliadas en números romanos, con escritura gótica textual en sus capítulos y cursiva en las adendas y refrendos finales, están escritas en tintas marrón para los textos y roja para calderones e iniciales de comienzo de capítulo.

Una atenta lectura de las mismas, evidencia que dicha congregación no solo existía porque había formalizado unas reglas, sino que con toda seguridad tenía una fuerte vida interna y llevaba varios años funcionando como Cofradía Hospitalaria y de Caridad.

Este códice con casi 6 siglos de antigüedad, muestra la mentalidad del hombre medieval evidenciando la importancia de sustento asistencial y protector de las agrupaciones religiosas locales. El valor que para dicha congregación tenían estos textos normativos es innegable, como muestra la nota de propiedad y “reclamo de devolución” que consta en su Portada:

“Si este libro çe[r] perdiere como çuele acontecer supilca [sic.] a el que se lo allare que me lo sepa volver. Sino sabe mi no[m]bre aquí abajo lo ponder [sic.] Bartolome Morolen”.

Como constatamos a través de otras fuentes documentales conservadas y consultadas en estos Archivos Catedral y Arzobispal -Libros de Valores y Subsidio del Fondo Catedral y Libros de Visitas del Fondo Arzobispal, entre otros- la Cofradía de la Trinidad tuvo una presencia continuada en la vida de Salteras hasta 1717, año a partir del cual no volvemos a encontrar rastro alguno de existencia de la misma.

1438 – 18, mayo, 1488. “Regla de la Hermandad y Cofradía de la Santísima Trinidad de Salteras”.

Enc. y hojas en perg. Ms. paginadas. Esc. gótica textual. 200 x 150 mm.

A.G.A.S. Fondo Arzobispal. Sign. 9969

Nuria Mª Prados Torres

Técnico Superior de los Archivos Catedral y Arzobispal de Sevilla de la Institución Colombina.