Monseñor Saiz Meneses a los periodistas: “Estamos llamando a ser los santos del tercer milenio”
El convento de la Visitación de Sevilla, de las religiosas salesas, ha acogido la tarde de este miércoles, festividad de San Francisco de Sales, una Eucaristía para celebrar la festividad del fundador de las salesas y patrono de los periodistas y comunicadores católicos. La ceremonia ha sido presidida por el arzobispo de Sevilla, monseñor José Ángel Saiz Meneses y concelebrada por el vicario episcopal para la Vida Consagrada, José Ángel Martín; el delegado diocesano de Medios de Comunicación, Leonardo Sánchez; el capellán de las salesas, Nelson Borges, el párroco de San Bartolomé, Juan José Sauco y los sacerdotes Eulalio Fiestas y Manuel Coronado. Del Seminario Metropolitano de Sevilla han participado Juan de Dios Varela y Luis Amodeo
Desafíos de la inteligencia artificial
Durante su homilía, monseñor Saiz Meneses, expresó que, “es esencial orientar la inteligencia artificial y los algoritmos, a fin de que se forme en todos una conciencia responsable del uso y del desarrollo de estas nuevas formas de comunicación que se suman a las de las redes sociales y a las de Internet. Es necesario que la comunicación se oriente hacia una vida más plena de la persona humana”.
El papa Francisco, en su mensaje con ocasión de la fiesta de San Francisco de Sales, resalta el papel que va a ocupar, no solo en el ámbito periodístico, sino en todos los sectores de la sociedad la incorporación de la inteligencia artificial como herramienta de trabajo. “El Santo Padre considera este hecho como algo absolutamente revolucionario, a la vez que señala que su introducción plantea nuevos desafíos, entre ellos evitar que las máquinas contribuyan a difundir un sistema de desinformación a larga escala, o impedir que aumenten la soledad de quien ya está solo, privándonos de ese calor que solo puede dar la comunicación entre personas”.
Experiencia profunda de fe
Don José Ángel señaló además que, “somos nosotros, cristianos de hoy, la luz del mundo y la sal de la tierra, y esta expresión tiene una significación muy profunda y un compromiso enorme, porque solo una persona puede ser luz en su cercanía con Cristo, en la unión profunda con el Señor que nos haga vivir una experiencia de fe. En definitiva, un encuentro con Cristo, que cambia la vida y el corazón”. En esta línea, resaltó que los cristianos de hoy “estamos llamados a ser luz y sal en un tiempo, lugar y dinámica concreta. Estamos llamando a ser los santos del tercer milenio, una llamada universal a la santidad que no está reservada a unos cuantos”, resaltó.
El arzobispo hispalense alertó sobre el peligro que corre la profesión periodística con la revolución de la inteligencia artificial que podría suponer un sistema de desinformación a gran escala, “cuando deshumaniza y aísla. La clave está en poner a la persona en el centro”. Finalmente, instó a los profesionales de la comunicación “a buscar siempre la verdad y el bien de las personas”.
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