Los abuelos. Ellos fueron padres, educaron y criaron a sus hijos con esfuerzo. Con el pasar de los años, se convirtieron en abuelos, y en gran ayuda para sus hijos también en esos momentos. El confinamiento los ha alejado en muchos casos de sus nietos. Pero incluso en esta situación siguen siendo los mejores transmisores de un gran tesoro: la historia familiar. Ésa que no es, ni más ni menos, que la misma “vida”: con sus encuentros, éxitos, fracasos, altibajos, crecimiento. El Dr. Cayetano García-Castrillón, profesional colaborador del COF de San Sebastián, nos habla sobre ello https://www.youtube.com/watch?v=JwGJvDrShds