JOAQUÍN LÓPEZ-SÁEZ
¿Cómo define la institución que dirige aquí en Sevilla en comparación con el resto de medios de comunicación del país?
COPE es un medio generalista, privado,integrado por diversos grupos, que tiene como accionista mayoritario a la Conferencia Episcopal Española (CEE), Este hecho le da una personalidad y una señal de identidad claramente confesional. Su ideario está inspirado en el humanismo cristiano y fue aprobado, hace ya bastantes años, por la Plenaria de la CEE. El propio beato Juan Pablo II refrendó su actividad en la visita que nuestro grupo le hizo hace diez años. Allí nos os manifestó que junto a medios de comunicación de contenidos exclusivamente religiosos deberíancoexistir otro medios generalistas que en su programación, no siendo exclusivamente de contenido religioso, tuviera una inspiración cristiana.
El reto no es fácil
Esta es la aspiración de COPE, aunque, efectivamente, reconozco que noes un ejerciciofácil. Para nosotros se convierte en una meta sobre la que trabajar cada día.
En la Iglesia Católica el objetivo principal es la Evangelización ¿Cómo se puede evangelizar desde COPE?
Esto es un debate abierto que tenemos en la actualidad. Podríamos hablar de doslíneas de reflexión abiertas. Por un lado, la apuesta de que todos los contenidos de la programación estén impregnados del ideario cristiano, manteniendo así nuestro compromiso evangelizador en un medio generalista. Y de otra parte, que la evangelización se desarrolle tan solo a través de la línea de programas exclusivamente religiosos, que pertenecen a lo que llamamos área socio-religiosa.Dentro de este apartado encontramos Iglesia Noticia, El Espejo de la Iglesia, en susediciones nacional y diocesana, y la Misa dominical, con un alto índice de audiencia.En estos momentos conviven ambas corrientes, si bien me inclino por la primera, de modo que todos los programas lleven impregnados el ideario del grupo y, por tanto,sirvan para evangelizar. De un modo explicito en los programas religiosos y de un modo implícito a modo de destilación, podríamos decir, en el resto. Esta postura me parece más inteligente y eficaz.
¿Este planteamiento está asumido por la plantilla de COPE?
Todo periodista valora a la hora de elaborar una noticia su trascendencia, más allá de la pura crónica. Por tanto se trata de que el trabajador de COPE se mantenga en consonancia con el Magisterio de la Iglesia y con el propio Evangelio.
Del modo de informar en la actualidad sobre la Iglesia se deduce que existe una falta de conocimiento de su estructura, su constitución ontológica y de supropio lenguaje ¿Cómo cree que se puede subsanar esa carencia tanto desde los medios como desde la propia institución eclesial?
Estoy de acuerdo con esta afirmación. Veo dos dimensiones del problema: por un lado, en una sociedad laicista y relativista, el periodista es el primer contaminado por esa realidad y se enfrenta a la Iglesia con cierta prevención. Se necesitan periodistas sin prejuicios, que valoren y censuren sin ninguna acritud, analizando y reflexionado la noticia. Pero también la Iglesia debe hacer un esfuerzo de acercarse a los medios de comunicación, y debe ella misma comunicar de un modo más eficaz, no solo utilizando las nuevas tecnologías, sino también hablando de modo más inteligible y cercano. Es una asignatura pendiente de la Iglesia en mi opinión, y eso abre todavía más la brechaentre el periodista que se encuentra distante y la Iglesia.
Será cuestión de tiempo…
No corren buenos tiempos para que se explicite con claridad el quehacer de la Iglesia. Esta debe hacer un esfuerzo de preparación, de educación y seguramente que también de tiempo.
En referencia a este esfuerzo por acercarse la Iglesia al mundo de la comunicación, ¿qué puentes se puedan establecer?
Muchos puentes. Pero subrayaría como urgentes dos en concreto: el hecho de que la Iglesia prepare personas en Comunicación Social, al igual que los prepara en otras materias como el Derecho, la Teología o la Economía. De este modo la propia institución empezaría a comprender las necesidades y el lenguaje proprio del mundo de la comunicación social. Otro objetivo sería pensar de qué manera conseguir paliar la animadversión hacia la institución de muchos medios que producen noticias negativas, e incluso ‘sonrojantes’, acerca de la Iglesia. De todos modos, hoy la Iglesia está teniendo la oportunidad de ser conocida en su acción caritativa-social, y ser valorada por otras instituciones, incluso hostiles a la ella. Se trata de poner en valor lo mucho y bueno que hace la Iglesia, que a veces se muestra muy endógena. No se trata de presumir sino de valorar lo que se hace.
El Papa ha elegido para la próxima Jornada de las Comunicaciones Sociales el lema ‘Las redes sociales como medio de evangelización’. Él mismo se ha incorporado hace pocos días a Twitter. ¿Qué opinión le merece la noticia?
Nuevamente, el Santo Padre demuestra una inteligencia extraordinaria. Fue una noticia celebrada por todos los medios de comunicación. Y en España tuvo una difusión excepcional. Se comentó de modo positivo el hecho de que el Papa, con su avanzada edad, recibiera el curso y que se interesara por entrar en una red con un público mayoritariamente joven. Valor incalculable que dará mucho fruto. La Iglesia no puede estar de espaldas a las nuevas tecnologías.
Adrián Ríos
(Entrevista publicada en el nº 45 de ARCHISEVILLA DIGITAL).
