Author image

XIII Domingo del Tiempo Ordinario (ciclo B)

Contigo hablo, niña, levántate

 En aquel tiempo, Jesús atravesó de nuevo en barca a la otra orilla, se le reunió mucha gente a su alrededor y se quedó junto al mar. Se acercó un jefe de la sinagoga, que se llamaba Jairo, y, al verlo, se echó a sus pies, rogándole con insistencia: «Mi niña está en las últimas; ven, impón las manos sobre ella, para que se cure y viva».  Se fue con él y lo seguía mucha gente que lo apretujaba.

Llegaron de casa del jefe de la sinagoga para decirle: «Tu hija se ha muerto. ¿Para qué molestar más al maestro?».  Jesús alcanzó a oír lo que hablaban y le dijo al jefe de la sinagoga: «No temas; basta que tengas fe».  No permitió que lo acompañara nadie, más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago.  Llegan a casa del jefe de la sinagoga y encuentra el alboroto de los que lloraban y se lamentaban a gritos y después de entrar les dijo: «¿Qué estrépito y qué lloros son estos? La niña no está muerta; está dormida».  Se reían de él.

Pero él los echó fuera a todos y, con el padre y la madre de la niña y sus acompañantes, entró donde estaba la niña, la cogió de la mano y le dijo: Talitha qumi (que significa: «Contigo hablo, niña, levántate»).  La niña se levantó inmediatamente y echó a andar; tenía doce años. Y quedaron fuera de sí llenos de estupor. Les insistió en que nadie se enterase; y les dijo que dieran de comer a la niña.

Marcos 21-24. 35b-43

Comentario bíblico de Antonio J. Guerra

Sb 1,13-15; 2,23-24; Sal 29; 2Cor 8,7.9.13-15; Mc 5,21-43

Hoy contemplamos a Jesús en la liturgia como “el Señor de la Vida y la Muerte”. El libro de la Sabiduría no titubea al afirmar que en el proyecto originario de Dios no hay espacio para la muerte, sino que todo lo ha creado para la vida, para que subsista eternamente: “Dios no hizo la muerte”, sino que ésta entró por “envidia del Diablo”; y será la muerte el destino de los que pertenecen al Maligno.

El salmo 29 anticipa la alegría de la victoria de Cristo sobre la muerte: “te ensalzaré, Señor, porque me has librado”. Con Jesús se lleva a consecución el proyecto de Vida que Dios tiene para el mundo.

En el evangelio, Jesús se muestra en plena sintonía con el plan de Vida de su Padre. Marcos nos narra un episodio de forma entrelazada, una escena dentro de la otra: dos mujeres en peligro, de enfermedad y muerte, en las que ambas aparecen como hijas, donde una y otra renacen a la vida gracias al encuentro con Jesús. El relato enseña el recorrido que el creyente tiene que hacer para experimentar a Jesús como el “Señor de la Vida”. Este camino tiene que estar presidido por la FE en la persona de Jesús. Tanto Jairo como la hemorroisa se acercan al Maestro con la confianza de que ÉL tiene poder para hacer lo que se le pide. En todo este itinerario, Jesús procura mostrarse cercano, para ayudar a comprender que ÉL es Señor de la Vida y también de la Muerte. Las risas y burlas en casa de Jairo reflejan también nuestra falta de fe. Frente a la increencia, Jesús nos invita a permanecer firmes en la fe y en la confianza, en definitiva a CREER en ÉL, sin condiciones.

Puntos para la reflexión:

  1. Ante el drama de la muerte, la fe cristiana no supone el antídoto que libra de la muerte humana, pero sí ofrece la luz para afrontarla: “el que crea en mí, aunque muera, vivirá”.
  2. El encuentro con Jesús se muestra como definitivo. De Él sale una fuerza de salvación, ¿caigo en la cuenta que los sacramentos son la fuerza que brota del cuerpo de Cristo?
  3. Jesús acompaña la incipiente fe de Jairo y la hemorroisa hacia una fe más profunda. ¿Al igual que Jesús, me preocupo porque los demás tengan un encuentro verdadero y profundo con el Señor?

 


CARTA DOMINICAL

Día de los Trabajadores (28-04-24)

26 abril 2024

Calendario de Eventos

« abril 2024 » loading...
L M X J V S D
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10
11
12
13
14
15
16
17
18
19
20
21
22
23
24
25
26
27
28
29
30
1
2
3
4
5
Ver más

Síguenos

TeamViewer para soporte remoto Archidiócesis

Intención de oración. Abril 2024