Manos Unidas sigue trabajando por los empobrecidos de la Tierra
María Albendea, presidenta-delegada de Manos Unidas Sevilla, ha informado que, pese a que las oficinas de la Delegación de Sevilla están cerradas desde la declaración del estado de alarma en España, Manos Unidas no cesa en su actividad de ayuda al empobrecido.
De hecho, siguen trabajando desde casa para dar la mejor respuesta posible a los cientos de proyectos que se desarrollan ahora mismo en los cinco continentes gracias a Manos Unidas. “Estamos todos conectados y trabajando. Todos los teléfonos se han derivado a los domicilios. Gracias a Dios la tecnología nos lo permite”, explica Albendea.
Sin embargo, se muestra preocupada por la llegada del coronavirus a los países en desarrollo: “Muchos no tienen ni agua ni jabón para el lavado de manos. Tampoco tienen nuestro sistema sanitario. Anoche me preguntaba una de las misioneras por los tratamientos para los infectados. Le he dicho que empiecen a hacer mascarillas si no las tienen”.
Eventos suspendidos o aplazados
Albendea señala que el pasado lunes hubiera tenido lugar la final autonómica de clipmetrajes, pero se suspendió.
Por otro lado, hoy jueves estaba previsto el concierto en Cartuja Center de Jaime Alpresa, organizado por la Fundación Cámara de Comercio, a beneficio de la obra social de la Hermandad del Amor y Manos Unidas. “Un evento que se ha aplazado a octubre o noviembre”, apunta.
Igualmente, el Foro Manos Unidas sobre la semana Laudato Si, que iba a tener lugar el próximo 8 de mayo, también se aplaza para el 9 de octubre, en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla, y versará sobre Derecho ambiental, Recursos Naturales y vulnerabilidad.
Lo que sí se ha mantenido son las Jornadas de Formación de Voluntarios fijadas para el 5 y 6 de junio, así como la Cena solidaria de la noche de San Juan, el 23 de junio, “con el fin de sensibilizar a la sociedad sevillana sobre la realidad del hambre y la íntima relación entre vulnerabilidad y cambio climático, tema de nuestra campaña. Irá asociada a la financiación de un proyecto en Benin, para mejorar las condiciones de las niñas de un internado rural en Kika”, concluye Albendea.
